La declaración injuriosa emitida por la Legislatura, integrada por representantes de partidos políticos involucrados en diversos escándalos como narcotráfico, lavado de dinero en sus campañas electorales, afiliaciones truchas, agresiones armadas a las fuerzas de seguridad o ilícitos similares, demuestra el odio discriminatorio hacia el nacionalismo, la absoluta irresponsabilidad política y la falta de inteligencia que caracterizan a esos legisladores, cuya única finalidad parece ser impedir que el pueblo pueda manifestarse libremente en las urnas en los próximos comicios.
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