jueves, 18 de septiembre de 2008

ADN: La pesadilla no tiene fin


Es lo que aseguran los padres biologicos de Carlos Ignacio Mancuso quien, segun las Abuelas de Plaza de Mayo, fue apropiado y adoptado ilegalmente. A pesar de que se comprobo a traves de un estudio genetico que era hijo legitimo de la familia Mancuso la agrupacion hace oidos sordos e insiste.

Por Maria Roberta Perujo Rivas



La causa fue iniciada por una denuncia “anónima” en donde aseguraba que Carlos Ignacio Mancuso era el nieto de la señora Jorgelina Azzarri de Pereyra.

Hace unos días se encontró al verdadero nieto de esta abuela, sin embargo la agrupación insiste con que Carlos Ignacio es hijo de desaparecidos a pesar que se comprobó con estudio de ADN que es en un 99, 99 % hijo de Carlos Ángel Mancuso y Dora Ignacia Jiménez.

Según un comunicado enviado a adnciudad.com, fuentes judiciales precisaron que “el pedido para realizar un nuevo estudio de ADN fue planteado después de que se comprobara que el joven, a quien suponían nieto de la titular de Abuelas seccional La Plata, Jorgelina Azzarri de Pereyra, no era la persona que buscaban”.

La señora Azzarri de Pereyra halló mediante la comprobación genética, a su verdadero nieto, situación que fue anunciada públicamente hace unos diez días.

“Las Abuelas de Plaza de Mayo insistieron ante el juez federal Norberto Oyarbide para que el joven Carlos Ignacio, a quien suponían nieto de una de ellas pero se comprobó que no lo es, se someta a un estudio genético que determine si es hijo de otros desaparecidos”.

El estudio genético realizado al joven Carlos Ignacio Mancuso fue realizado en el Cuerpo Médico Forense, con la participación del Primer Centro Argentino de Inmunogenética (PRICAI-Fundación Favaloro) y confirmó el lazo de sangre con sus padres, Carlos Ángel Mancuso y Dora Ignacia Jiménez.

Ese estudio, que dio como resultado que en un 99,9999999 % Mancuso tiene lazos de sangre con su actual y hasta ahora única familia, sin embargo fue objetado por Abuelas, porque no se realizó en el Banco de Datos Genéticos (BNDG) que funciona en el hospital Durand, tal como lo exige la ley vigente.

Por ello, es que el señor Carlos Ángel Mancuso, quien asegura no tener ninguna vinculación con la represión ilegal, emitió una carta abierta a las Abuelas que adnciudad.com transcribió en forma completa, en donde expresa “su inmensa alegría... ya que han recuperado a dos nietos de los tan ansiosamente buscados durante tantos años”.

“Sin embargo, la pesadilla continúa ya que la causa sigue adelante”, afirmaron en el comunicado.

Y esto es así ya que deberán continuar con lo que el 30 de junio pasado Oyarbide dispuso, que es recrear el examen de ADN del joven pero para compararlo sólo con sus padres y excluyendo del trámite a las Abuelas, aunque ordenó que el estudio se realice en el BNDG.

Esa decisión fue apelada por los Mancuso, quienes reivindican la validez del examen de ADN ya realizado y cuestionaron la imparcialidad del Banco de Datos Genéticos.



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